RICARDO APARICIO

“Esencias” Del 22 de febrero al 12 de marzo de 2016

RICARDO APARICIO (Sevilla, 1969).

Formación: Diplomado en Ciencias empresariales y Licenciado en Marketing y Gestión empresarial por Crandon College University World. Sendos Máster en Cultura Contemporánea Española y en Arte y Antigüedades por la Universidad de Alcalá de Henares.

Muestras (selección): 2016| “Esencias”, Galería Orfila,Madrid. 2015] Sala de Exposiciones Centro Cultural Ibercaja, Guadalajara. 2013| “Abstracción inducida” Alicia Rey Gallery, Madrid, ” Esencias I” Ateneo de Madrid. 2011| Casa de Cantabria, Madrid. “Campo andaluz”, Ateneo de Córdoba. “Visiones”, Galería BDK, Vitoria. 2010| Sala Antonio Bienvenida, Plaza de Toros de Las Ventas, Madrid. Galería Art Question, Ourense. 2009| Sala de Cultura del Ayuntamiento de San Lorenzo Escorial, Madrid. 2008| Real Círculo de la Amistad, Liceo y Ateneo Córdoba, Le Petit Atelier Gallery, Lérida. Sala Tartufo, Santander. 2007| Cernuda Art Gallery, Miami, USA.

Colectivas (selección): 2015] ch.ACO Santiago de Chile, Alicia Rey Gallery. 2014| Edinburh Art Fair, Galería Gaudí. “El movimiento intuitivo” Alicia Rey Gallery, Madrid. Art´FAIM 14 en MATADERO Madrid. Affordable Art Fair Milán, Alicia Rey Gallery. 2013| XI Certamen Internacional de Arte Contemporáneo Galería Aires, Córdoba. Affordable Art Fair Battersea London, Alicia Rey Gallery Affordable Art Fair México DF. Present Art Festival Shanghai. Present Art Space Florence. Suit Corner Toshy – Hotel Flat Iron, Nueva York. 2012| Artexpo – Midtwon Miami. Affordable Art Fair Hamburg, Le Petit Atelier Gallery Art contemporary Fair – Carrousel Du Louvre, París, France. 2010| Exposición colectiva, Galería Paz Feliz, Madrid. Exposición colectiva, Galería Victor i Fills, Madrid. Exposición colectiva, Galería Artspace-Berlín, Madrid. 2009| Affordable Art Collection’09. Exposición colectiva, Museo Diocesano Catedral de Barcelona. Colectiva “Zona Balmes”, Galería Global Present Art, Barcelona. 2008| Colectiva “Vera”, Galería Verastilo, Almeria. 2007| 24 artistas internacionales, Galería Flohr, Mallorca.

Colaboraciones (selección): Fundación de las artes y los artistas, Málaga. Fundación Laboral del Principado de Asturias, Oviedo. Colaborador como artista miembro del Instituto de Arte Contemporáneo. Socio de la agrupación de artistas Madrileños (AVAM). Colaborador de la publicación Art’è (FMR) en Milán. Colaborador de la organización Arte Joven, de la Comunidad de Madrid. Artista colaborador del proyecto Ayuda a Turkana, sociedad sin ánimo de lucro: Turkana Project SL, Kenya. Artist collaborator with the draft Charitable House Equestrian Order of the Holy Sepulchre of Jerusalem. Artista colaborador con el proyecto Clases con Puertas abiertas para estudiantes del alto Perú.

Menciones: Académico asociado de la Academia Internacional Greci – Marino. Verbano di Lettere Arti Scienze Vinzaglio (Italia). Casa Editrice 2007-2008. Mención especial en la Bienale di Firenze 2007. Medalla ALBA 08 Ferrara.

Colecciones: Museo de la Plaza de Toros de Las Ventas, Madrid. Museo taurino de Córdoba. Colecciones privadas en Miami y Nueva York.

Historia de una abstracción instigada.

Resulta llamativo en el recorrido de Ricardo Aparicio su permanente y fiel relación con la abstracción, desde la que ha abordado incluso, en otros momentos, temas propiamente figurativos, sin desdecirse nunca de esa premisa fundamental en su obra que él mismo nos explica -en la conversación que tuvimos sobre su presente exposición, “Esencias” – con el concepto o la idea de una abstracción instigada. Digamos que esta última, marcando de alguna manera el signo de su evolución, se presenta ahora, en estos últimos trabajos, como la concreción explícita de aquello que había perseguido siempre, “instigándolo” desde el mismo proceso dinámico y depurativo que implicaba, hasta llegar aquí.

Si todo esto tiene que ver con una búsqueda personal centrada en la expresividad -de la que la abstracción vino históricamente a dar cuenta en tanto la culminación del arte como hecho autónomo -, dicho objetivo no se encuentra en nuestro caso en la mera ausencia de representación (o su sustitución por las sugestiones de que es capaz la pintura pura), sino, más allá, en propiciar la participación del espectador a que induce tal instigamiento. Esto es así desde el momento que la elocuente distribución de manchas y colores que Aparicio ofrece a su mirada, aun sin abandonar el carácter bidimensional y anti-ilusionista del cuadro, encuentra en el azar la posibilidad que le brinda concebir libres y hasta entonces incógnitos espacios, invitándole a desprenderse en ese juego del dictado de lo factual y la comprensión utilitaria que informa nuestra relación con lo real, acaso para toparnos, en un instante fugaz, con su verdadera esencia.

Como la temperatura del color, de meridional luminosidad, las obras de Ricardo Aparicio configuran superficies magmáticas, haciendo que sus elementos parezcan en una virtual y primordial fase de formación; técnicas mixtas en ebullición que nos transmiten una energía a la que se une la elección -nada fortuita – de variados soportes, desde el lienzo tradicional a maderas, telas de saco, aceros o cristal, cuya presencia redondea el carácter objetual de sus obras, encerradas en sí mismas y en su propio misterio, aunque nunca nos dejen, al cabo, indiferentes. Esta fisicalidad, alejada tanto del desasosegado materismo de algunas propuestas informales, como, en el otro extremo, de la calculada frialdad de ciertos austeros y lejanos minimalismos, aun bebiendo de unas y otros, se inscribe pues, desde la gozosa vitalidad que reclama, dentro de los principales parámetros del arte contemporáneo.

Una fisicalidad que expande dando lugar también a nuevos soportes, como otras piezas que aporta a la exposición: dos mesas, con la imagen en negativo y positivo, respectivamente; un biombo cuya superficie traslúcida de metacrilato, pintada por los dos lados, sirve para la separación funcional de espacios en un lugar habitacional además de para el exterior. Con ellas, más que inmiscuirse en el campo del diseño, no hace sino incorporar a éste ese mencionado papel no utilitario que el arte tiene en nuestras vidas, sin el cual no seríamos libres de imaginar y dotar de nuevo sentido a nuestra realidad en torno.

A. Leyva Sanjuan